lunes, 4 de octubre de 2010

Francisco de Asís. El enamorado de la Hermana Pobreza

Hoy a las 5,30pm habrá rezo del Santo Rosario, luego a las 6,00pm se realizará la solemne Eucaristía de fiesta de san Francisco de Asís y a las 7,30pm el compartir fraterno. LUGAR: parroquia san Antonio de Padua (templo san Agustín) esquina de Bolívar con Orbegozo.

A continuación la historia de Francisco. Hermano de todos...

1202. El Caballero Francisco, marcha a la guerra, deseando cubrirse de gloria y honor. Pero quiso la Providencia derribarle de ese caballo y someterlo a prisión. El jovencito Francisco, es hecho preso por sus enemigos y sometido a toda clase de humillaciones. Regresa a Asís contrito y con la armadura destrozada...no solo la de acero, sino también la de su espíritu. Se da cuenta de que las fiestas y la vida galante dejan poco a poco de interesarle y empiezan a hacerse visibles a su alrededor, los sufrientes. La Hermana pobreza, encarnada en las manos de los miserables que no tienen donde caer muertos. La belleza de esta hermana no deseada, se le empieza a hacer cada vez más irresistible y decide abandonar la vida regalada junto a sus padres, para dedicarse a la oración y el recogimiento.

En San Damián, un Cristo clavado en una cruz de madera le habla: "Francisco, restaura mi iglesia". Le ordena. Y él piensa que se refiere a que reconstruya aquella Iglesia que estaba en ruinas, pero la Iglesia a la que se refería era otra....

La Pobreza en la que viven los leprosos de Asís, le conmueve. Se dedica a curarlos y regalarles amor. También se dedica a dilapidar lo que no es suyo. Regala los bienes de su padre, un rico comerciante, a los pobres y este decide, encerrarlo y ponerle bajo la custodia de su madre. Su padre pensaba que su hijo estaba loco y que quizá así recuperase el juicio. Pero no se puede pretender que una madre sea carcelera del retoño de su vientre. Doña Pica le deja muy pronto en libertad.

Después de eso Francisco renunciaría ante toda la ciudad a cualquier posesión de su padre. Entregándole incluso las ropas que vestía, se quedó desnudo en frente de todos, ante las puertas de la Catedral. El Obispo, conmocionado por el ejemplo que había dado, de completa renuncia a las ilusiones del mundo, le cubre con un saco...este sería el germen del primer hábito franciscano, una arpillera basta y sencilla, como sencilla era la persona que la llevaba.

Poco a poco el espíritu del enamorado prende en la juventud de Asís, y una revolución se produce en la ciudad. Los jóvenes abandonan sus casas y posesiones, para ir a vivir con Francisco en el campo, cuidando de los leprosos y mendigando. Muy pronto se les une la joven Clara, que luego fundaría las Clarisas.

Con doce de sus amigos, Francisco viaja a Roma para ver al Papa y pedirle permiso para fundar la orden franciscana. El Papa había tenido un sueño, en el que la basílica de San Juan de Letrán, que por aquel entonces era la sede papal, se desmoronaba. Un hombre vestido con un saco, aparece de pronto, y apoya con su espalda las columnas, evitando que el edificio se caiga. Sobre él, descansa la Iglesia y no se hunde. El Papa reconoce en ese extraño hombre, a Francisco cuando se postra ante él. Inmediatamente accede a su petición y da el visto bueno a la Regla Franciscana
(a la derecha el Hábito de san Francisco)
Después de esto, miles de personas de todo el mundo empezaron a unirse a la recién creada Orden. Luego llegarían los estigmas. Francisco sufrió la visita de un extraño ser que le marca en su cuerpo con las señales de la pasión del Cristo. Estas heridas le acompañarían durante toda su vida.

Francisco viajaría con los cruzados a Egipto, donde consiguió del Sultán, el privilegio de que fuesen los franciscanos los guardianes de los Santos Lugares...casi 1000 años después, los franciscanos siguen custodiando en Tierra Santa, todos los santuarios que tienen que ver con la Vida del Cristo.

Le llegó la hora de reunirse con la Hermana No Amada...la Muerte, en Asís. Pidió que le pusieran desnudo sobre la Tierra, para poder irse, de la misma manera que llegó al mundo...sin nada.

Antes de morir, pidió que le enterraran en el sitio en el que en Asís ejecutaban a los criminales.

Francisco había acabado su existencia en la carne, había recibido el beso definitivo y último de su esposa Hermana Pobreza, que le esperaba bajo el gran arco de la aurora, pero su sangre y su sombra llegaban ya a los confines del mundo. Había abierto caminos de Amor para que otros enamorados pudieran recorrerlos. Había convertido las tinieblas en luces y los desiertos en manantiales, recogiendo los dolores del mundo y convirtiendo el sufrimiento en Esperanza. Cubrió la Tierra de piedad y transformó las tumbas en cunas. Su muerte fue una fiesta y su vida un parto. Vivió acunado por los vientos y con las montañas como almohada....este era mi Francisco.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola. me gustó esta lectura y aunque no profeso la religión católica admiro a este hombre que vivió lo que predicó. Saludos desde Barranquilla, Colombia.

Anita Zavala dijo...

Tienes razón acerca de Francisco, hermano de todas las personas, de las plantas y las estrellas de cielo.

Saludos para ti. Paz y bien.

Anónimo dijo...

"EL SEGUNDO DESPUES DEL, PRIMERO Y EL ÚNICO". EL MÁS RICO PROBELO DE ASIS. RICO EN AMOR PAZ Y BIEN PARA TODOS LOS SIN BANDERAS, HOMBRES Y MUJERES DE BUENA VOLUNTAD HUMANOS HIJOS DE DIOS DE CORAZÓN ABIERTO QUE SON CONSIENTES QUE TIENEN DENTRO DE SUS CUERPOS EL ESPIRITU Y LA SEMEJANSAZA DE DIOS.
NO HAY PALABRAS PARA REFERIRSE A ESTE MARAVILLOSO HOMBRE GRANDE SIERVO DE DIOS QUE SOLO INSPIRA AMOR PAZ Y TODO EL BIEN DE LA LUZ DE DIOS. ALGO DE LO QUE HUMILDEMENTE PUEDO DECIR FRANCISCO.CON MUCHO AMOR.. BETGRACIE