Hoy cantamos en el convento de las hermanas clarisas, la misa de cumpleaños del Padre Abel (en primera fila al lado de su señora madre). Varios de nosotros cantamos cuando él se ordenó.
A la hora de la homilía se resaltó su corazón generoso, acorde al Evangelio de hoy: por sus frutos los conocerán. El Padre William recordó anécdotas de sus épocas de estudiante en el seminario, en las cuales Padre Abel era formador.
Señor, permite a estos siervos tuyos continuar alabándote a través de su labor pastoral, a través de la difusión de tu Evangelio.
Lectura del santo Evangelio según san Mateo 7, 15-20
Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con disfraces de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos? Así, todo árbol bueno da frutos buenos, pero el árbol malo da frutos malos. Un árbol bueno no puede producir frutos malos, ni un árbol malo producir frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y arrojado al fuego. Así que por sus frutos los reconoceréis.
¡Nos vemos mañana celebrando el Corpus Christi en la Plaza de Armas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario