Hasta luego, Facundo Cabral

Cuando mi tía Sara K. me culturizaba acerca de la buena música con contenido serio y protestón, no podía faltar Facundo Cabral, y parodiando un poco su nombre: fue fecundo y cabal. Fecundo al dejarnos tantas obras maestras escritas desde el humanismo más profundo, y cabal porque no se vendió a las tiranías.

En reconocimiento a su constante llamado a la paz y al amor, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) lo declaró “Mensajero Mundial de la Paz” (1996). De hecho, el presidente Oscar Arias Sánchez de Costa Rica, lo propuso para el Premio Nobel de la Paz. Fue miembro honorario de Amnistía Internacional.

Uno de sus temas consagrantes fue: Yo no soy de aquí, ni soy de allá. Les dejo dos videos de él. En este primero pide perdón por no dejarnos nada... quién diría que sí nos dejaría grandes enseñanzas y que... nosotros tendríamos que pedirle perdón a nombre de sus asesinos.

"Cuando un amigo se va". Esta canción la aprendí en la parroquia, hace más de 15 años, me la enseñó Gisselle P. y la cantamos en la misa de la mamá de Ulises V. Qué belleza de canción... qué tiempos. Aprovecho para saludar y abrazar a la distancia a mis amigos ex jufristas. Bendiciones para ustedes y sus familias.