Se empezó aproximadamente a las 11,10 am. y contamos con la presencia de nuestras autoridades y un grupo bastante nutrido de docentes.
A modo de reseña:
- La universidad católica no sólo debe formar profesionales de primera, también con valores universales que amen la ciencia y el bienestar que los demás.
- Cuando uno ama (en el auténtico sentido cristiano) puede hacer lo que quiera, así como decía san Agustín. Esto no es libertinaje, sino saber actuar expresando el amor. En cambio cuando nos alejamos del amor de Dios, buscamos migajas en el amor de los hombres... pero ya todo el mundo sabe que de migajas no se puede vivir, y mucho menos formar una familia... aunque esa familia ser académica, sanguínea o amical.
- La Iglesia tiene un bagaje cultural y académico de 20 siglos que deben ser compartidos, por eso se insta a la universidad a cumplir ese rol de formadora. Y formadora en la antropología creacional y redentora.
- La visión de universidad católica que trasmite Benedicto XVI en sus documentos es de unidad entre Verdad y Bien; para que los ojos de la mente vean lo mismo que los ojos del corazón... sólo así los estudiantes pasarán de una reflexión profunda al actuar- pensar con unicidad.
Se invita además a la clausura del club del rosario, el miércoles 27 a las 4 pm.
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